Se dispone de varias técnicas para generar una imagen interna del cuerpo y sus estructuras. Los tipos de métodos de imagen son:
Radiografía, que es la técnica más frecuente empleada por los médicos para obtener imágenes del interior del cuerpo. Los especialistas pueden detectar zonas anormales que pueden indicar la presencia de un cáncer.
TC (tomografía computarizada), que utiliza haces radiológicos para crear imágenes informatizadas detalladas obtenidas con un aparato de rayos X especial. Es más precisa que las radiografías convencionales y proporciona imágenes más claras.
Resonancia magnética (RM), que emplea un campo magnético potente para generar imágenes informatizadas detalladas de los tejidos blandos, los grandes vasos sanguíneos y los órganos principales del cuerpo. La RM es un procedimiento exacto, aunque costoso, y los pacientes deben permanecer tumbados sin moverse para obtener los mejores resultados.
Ecografía, que emplea ondas de sonido de alta frecuencia para determinar si un bulto sospechoso es sólido o líquido. Estas ondas sonoras se transmiten en el organismo y se transforman en una imagen informatizada.